miércoles, 9 de febrero de 2011

¡Es Tiempo De Levantarse!

¡Es Tiempo De Levantarse!
Romanos 13:11-14

Apatía, desidia, falta de interés. Problemas frecuente en cada generación de cristianos que ha compuesto la iglesia.
También estuvo presente en la iglesia primitiva. Las siguientes reprensiones del Señor lo hacen obvio.
• “Pero tengo contra ti, que has dejado tu primer amor” (Ap. 2:4)
• “Yo conozco tus obras, que ni eres frío ni caliente. ¡Ojalá fueses frío o caliente! Pero por cuanto eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca” (Ap. 3:15-16).
Estas punzantes palabras llevan el reproche del Señor a cristianos indiferentes. ¿Y qué de nosotros respecto a las cosas espirituales y eternas? ¿Estamos aletargados e indiferentes? ¿Somos meros religiosos que asistimos a ciertos servicios de la iglesia para cumplir ciertos rituales?
Si esto es así, la amonestación del apóstol Pablo a la iglesia en Roma son adecuadas para nosotros hoy, para despertarse del letargo, del sueño de la indiferencia, pues, “¡Es Tiempo de Levantarse!” .

¡ES HORA DE LEVANTARNOS!
“Y esto, conociendo el tiempo, que es ya hora de levantarnos del sueño; porque ahora está más cerca de nosotros nuestra salvación que cuando creímos. La noche está avanzada, y se acerca el día. Desechemos, pues, las obras de las tinieblas, y vistámonos las armas de la luz” (Rom. 13: 11-12)
“Conociendo el tiempo”. El tiempo es el haber más valioso que el hombre posee.
“El tiempo” en que vivían, la naturaleza del tiempo que era de carácter puramente malo.
“Aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos” (Ef. 5:16). Tener presente “que ya es hora de levantarnos del sueño”
• “sueño” figura también usada en (1 Tes. 5:6-6).
• Levantarse de la indiferencia, del descuido y de la falta de atención a las cosas espirituales.
• El descuido que permite el pecado en nuestras vidas, cuando nosotros profesamos ser cristianos.
• La exhortación de Pedro: “Baste ya el tiempo pasado para haber hecho lo que agrada a los gentiles, andando en lascivias, concupiscencias, embriagueces, orgías, disipación y abominables idolatrías” (1 Ped. 4:3).
• Ahora es el tiempo de obedecer al Señor “He aquí ahora el tiempo aceptable; he aquí ahora el día de salvación” (2 Cor 6:1-2).

Nuestra Salvación Está Más Cercana.
“Salvación” en este versículo se refiere a nuestra salvación final en el cielo (1 Ped. 1.5). En vista de que recibiremos esta salvación cuando el Señor vuelva (Heb. 9.28), ella “está más cerca de nosotros… que cuando creímos”. Por tal razón debemos de “…ocupaos en vuestra salvación con temor y temblor” (Fil. 2:12).
Tener presente esta gran pregunta “¿cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande…?” (Heb 2:3)
En las palabras de Pablo a los romanos está implícita la necesidad de que sus lectores despierten porque Cristo podía venir en cualquier momento. Si estaban dormidos espiritualmente, no iban a estar preparados para Su venida.

LA NOCHE ESTÁ AVANZADA... SE ACERCA EL DÍA.
¡Simplemente significa que es hora de levantarnos y de empezar los deberes del día! ¡Andemos Como De Día!
Jesús dijo: “Vosotros sois la luz del mundo” (Mat. 5:14-16).
• “Porque todos vosotros sois hijos de luz e hijos del día; no somos de la noche ni de las tinieblas” (1 Tes 5:5).
• “Pero nosotros, que somos del día, seamos sobrios, habiéndonos vestido con la coraza de fe y de amor, y con la esperanza de salvación como yelmo” (1 Tes. 5:8)
• Por tal razón: “…conducíos en temor todo el tiempo de vuestra peregrinación” (1. Ped. 1:17)
Desechemos las obras de las tinieblas.
Pablo a menudo usó las figuras de “desechar” y “vestirse” refiriéndose al uso común de quitarse y ponerse prendas de vestir (Ef. 4.22–24; Col. 3.8–10). Pablo exhorta a quitarse el atuendo de dormir y a ponerse la ropa apropiada para las actividades del día.
La frase “obras de las tinieblas” se refiere a actos pecaminosos (Jn. 3.19; 1 Tes. 5.7).
El cristiano tiene que dejar de andar en las cosas pecaminosas (Ef. 5:15).
La lección para los cristianos romanos, y para nosotros hoy, es dejar por completo de andar en las tinieblas del pecado y comenzar a andar en la luz del evangelio.

“ANDEMOS COMO DE DÍA, HONESTAMENTE”
Una vez despierto, levantados y vestidos ¿Qué hacer?
“Andemos como de día, honestamente” (Rom. 13.13).
Debemos de vivir vidas que glorifiquen a nuestro Dios y Salvador. Los pecadores aman las tinieblas porque sus obras son malas (Jn 3:19),
La expresión “como de día” indica que hemos de vivir nuestras vidas abiertamente, no avergonzados de pecados secretos u ocultos, para que nuestro vivir puedan ser examinadas por todos. El cristiano anda “de día,” en la luz del evangelio. Lo cual demanda pureza de vida.
Luego Pablo da seis ejemplos de “obras de las tinieblas” que debemos evitar:
• “…glotonerías y borracheras, no en lujurias y lascivias, no en contiendas y envidia” (ver. 13).
• No es un catálogo completo de “obras de las tinieblas” es una lista representativa.
Los seis ejemplos del texto están agrupados en tres.
• “glotonerías y borracheras”“komos y methe”
“Glotonerías” del griego “komos ” que quiere decir banquete con gran algazara, regocijo ruidoso. Los paganos primero se emborrachaban y luego marchaban por las calles cantando escandalosamente y causando grande alboroto.
“borrachera” del griego “methe”. Glotonerías y borracheras eran a menudo vinculados.
• “lujurias y lascivias” del griego .
La “lujuria = koite” la palabra para “cama o lecho” . Aquí la palabra se usa para apuntar a 1o que se practica ilícitamente en el lecho, que es la fornicación. “Koite” se usaba aun en nuestros días como eufemismo de relaciones sexuales. Ejemplo “Se fueron juntos a la cama”.
“lascivias” del griego “Aselgeia” Esta palabra griega denota: exceso, carencia de límites morales, ausencia de restricciones, indecencia, capricho. La idea principal es conducta desvergonzada.
• “Contiendas y envidias”.
“Contienda” del griego “eris”, que se refiere a pugna, la expresión de enemistad. “Eris” refleja un espíritu de competitividad que pelea por salirse con la suya, aunque tenga que pasar por sobre los demás.
Se vincula con “envidia” del griego “zelos” describe el espíritu que no puede contentarse con lo que tiene, y que mira con ojos de envidia toda bendición que otro obtenga y se le priva a él.
En la clasificación de algunos cristianos los primeros cuatro pecados: glotonerías, borracheras, lujurias y lascivias, son mirados como pecados muy malos, pero ponen a las contiendas y la envidia en la categoría menos mala. Pero Dios no clasifica los pecados como “grandes” o “pequeños”. Pablo pudo haberlas enumerado al último porque a algunos de nosotros nos cuesta más deshacernos de estos que de los primeros de la lista.

“VESTIDOS DEL SEÑOR JESUCRISTO.”
¿Qué Significa “Vestidos Del Señor Jesucristo”? Nos vestimos del Señor Jesucristo cuando somos bautizados, “bautizados en Cristo Jesús” y “somos plantados juntamente con él”
“…todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos” (Gál. 3:27)
Pero debemos aprender a vivir como personas que se han “vestido de Cristo” Necesitamos vestirnos con la bondad, la benignidad y la fortaleza del Señor. Si hacemos lo anterior, evitaremos los tipos de pecados enumerados en el versículo 13.
“No Proveáis Para Los Deseos De La Carne”
¿Qué significaría proveer para la carne? Significa favorecer los malos deseos que exigen ser alimentados. Se niegan morir (Gál. 5: 16-17; Col.3:5)
Por ejemplo: Si usted se acuesta tarde el sábado por la noche, sin preocuparse por estar descansado para el servicio de adoración al día siguiente, usted está proveyendo para faltar al culto. (Heb. 10 25)
¿Cuáles son mis debilidades espirituales? Una pregunta necesaria.
El diablo conoce nuestras debilidades y las usará para destruirnos. Por tal razón pregúntese: ¿Qué personas, qué lugares, qué actividades y qué situaciones son las que más me animan a ceder a la tentación. Una vez que responda a esta pregunta, haga todo lo posible por mantenerse alejado de esas personas, de esos lugares, actividades y situaciones. No hacer lo así equivale a “proveer para los deseos de la carne”.

Conclusión:
En romanos 13.11–14 tenemos “Un llamado de Dios para levantar al cristiano de la falta de interés, de la apatía y la desidia”.
¡Y nosotros! ¿Estamos durmiendo? ¿Somos indiferentes a los asuntos del espíritu? ¿Estamos descuidando las cosas eternas? Necesitamos ser SANTOS, personas amorosas y piadosas.
En vista de que el Señor podría venir en cualquier momento, cada uno de nosotros debe preguntarse: ¿Estoy preparado para cuando Él venga?
“Si alguno no ama al Señor, que sea anatema”. ¡Maranata! (1 Cor. 16:22).

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