martes, 23 de agosto de 2016

“Mirad, Pues, Cómo Oís”

“Mirad, Pues, Cómo Oís”
Lucas 8:18.

Introducción:

Durante su ministerio terrenal, Jesús a menudo concluyó sus enseñanzas diciendo: "¡El que tiene oídos para oír, que oiga!"
-       Lo dijo cuando habló acerca de Juan el Bautista (Mat. 11:15)
-       En la parábola del sembrador (Mat. 13:9)
-       Otra vez en la explicación de la parábola de la cizaña (Mat. 13:43).
-       En sus cartas a las iglesias de Asia menor, Jesús concluye cada una con un dicho similar: “El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias " (Ap. 2:7, 11, 17, 29; 3:6, 13, 22).

¿Cuál es el sentido de estas palabras?
Equivale decir: ¡¡Atención!! Lo que se está diciendo es muy importante, así que presten mucha atención al escuchar (Mar. 4:23-25).
-       Jesús se encontró con este problema en el oír, que también es recurrente en la sociedad de hoy.
-       Muchas personas simplemente escuchan, pero no oyen. No escuchan para comprender.
Estoy convencido de que hoy muchos no se dan cuenta de la importancia de oír con atención.
Apropiado es preguntarse: “¿Qué tan bien estamos oyendo nosotros?"

PONDREMOS ATENCIÓN EN TRES TIPOS DE OYENTES.

Los "Tardos Para Oír"
-       Algunos de los cristianos hebreos eran así (Heb. 5:11).
-       Tenga en cuenta que cuando una persona tiene este problema, ¡es difícil explicar las cosas a ellos! No se concentran ni ponen atención.
-       La culpa no es del que enseña, sino del "oyente"
1.    Isaías escribió acerca de tales personas, y Jesús la aplicó a muchos en sus días (Mat. 13:13-15).
-       ¡La gente es así porque son duros de corazón! Esto les impide comprender:
·         La verdad de Dios.
·         La condición del pecador ante Dios.
·         La salvación que provee Dios

2.    Los Que Tienen "Comezón De Oír".
-       Pablo describe de estos en 2 Timoteo 4:3-4.
-       Estas personas sólo escuchan lo que les es agradable, quieren que se les entretenga.
-       Así que no les gusta la "sana doctrina".
-       Tales oidores van a encontrar a los maestros que rasquen su comezón de oír (2 Tim. 2:3). Son como los oyentes descritos por Isaías (Is. 30:10).

3.    Los Que Escuchan Con "Un Corazón Bueno Y Recto".
-       Jesús habla de ellos (Luc. 8:15).
-       Los de Berea eran oyentes de este tipo (Hch. 17:11).
-       Eran "nobles”, dispuestos a oír como una audiencia justa.
-       Se mostró en su forma de "recibir" (o escuchar) la palabra:  "Con toda solicitud"
-       ¡Este es el tipo de oyente que todos debemos ser!
En los siguientes puntos veremos la importancia de ser este tipo de oyente.

LA IMPORTANCIA DE OÍR BIEN.

Oír Con Atención Es Esencial Para Ser Bendecido.
-       Aquellos que están dispuestos a escuchar con atención encontrarán maravillosas cosas que aprender (Mat. 13:16-17).
-       Todas las maravillosas bendiciones que están disponibles en Cristo (Ef. 1:3)
-       ¡Podemos perder estas bendiciones si no escuchamos con atención!

Oír Con Atención Es Esencial Para Cultivar La Fe.
-       Dios ha ordenado que seamos salvos por la fe en Cristo (Gál. 2:16)
-       Esta fe viene por medio de oír la Palabra de Dios (Rom. 10:17).


El Oír Con Atención Fue diseñado para tener fe a través de la lectura de la Palabra de Dios (Jn 20,30-31).
-       Una razón por que la fe es a menudo insuficiente es porque los cristianos simplemente no son buenos lectores u oyentes.
-       Recuerde a los hermanos hebreos que permanecían en su infancia espiritual por haberse hechos “tardos para oír” (Heb. 5:11).
-        
¿Y qué de nosotros? ¿Nuestra forma de "escuchar" obstaculizar el desarrollo de nuestra fe?

Oír Con Atención Es Esencial Para Dar Frutos.
-       En la parábola del sembrador, el único tipo de suelo (corazón) capaz de dar fruto fue el que escuchó correctamente, los que “retienen la palabra oída” (Luc. 8:15).
-       ¡Eso se debe a que su fruto viene de “oír y conocer” la gracia de Dios! (Col 1:6).
o   Tenga en cuenta que el evangelio fue dando sus frutos en los Colosenses
o   Pero eso era "desde el día que oísteis y conocisteis la gracia de Dios en verdad"; ¡Sólo por escuchar bien podemos "entender" la gracia de Dios, y ser así motivados a dar sus frutos para su gloria!

Oír Con Atención Es Esencial Para La Prevención De La Apostasía.
-       Existe el peligro real de pasar por alto "una salvación tan grande" (Heb. 2:1-3)
-       La única solución es que “con más diligencia atendamos a las cosas que hemos oído”.

¡CUIDADO! ¡El escucha despreocupado es a menudo el primer paso hacia la apostasía!

Oír Con Atención Es Esencial Para Evitar La Condenación.
-       Si no escuchamos lo que deberíamos ...
-       Los que enseñan la Palabra de Dios tiene el derecho de desistir seguir enseñándonos a los que no oyen con interés (Mat. 10:14-15.}
-       Con la actitud de no querer oír con atención, nos estamos juzgando indignos de la vida eterna (Hch. 13:44-49).
Debemos de apreciar las maravillosas oportunidades que tenemos de poder oír la Palabra de Dios.

MEDIDAS PARA MEJORAR NUESTRA FORMA DE ESCUCHAR.

Hacer Del oír Bien Un Acto De Culto.
-       Cómo escuchar la palabra de Dios cuando es leída o predicada es una indicación de nuestra devoción a Dios, igual a la que debemos mostramos al orar o cantar.
-       Así que cuando nos reunimos a escuchar la Palabra de Dios, hagámoslo con toda reverencia, con una actitud de adoración.
-       La proclamación de la Palabra de Dios merece nuestra total atención.

Cuando Escuche La Enseñanza con atención, Escuche De Principio A Fin.
-       Prestar atención a todo lo largo de la enseñanza.
-       Al escuchar la enseñanza bíblica debemos oír con atención cada oración, cada frase, cada palabra.
-       Para entender se debe oír a la luz del contexto en el que se presenta el tema expuesto. Si usted llega atrasado a las reuniones esto no será posible.
Como se espera que el predicador debe seguir ciertas reglas de homilética para que sea entendido. Así también los oyentes deben escuchar de principio a fin una lección para comprender lo expuesto y ser edificado.
-       Ponga mucha atención.
-       Tome nota de la lección.
-       No se distraiga, no salga del lugar de reunión.

Esté Atento Al Predicador.
-       Esto hará más fácil su concentración.
-       No se distraiga con cosas de la sala de reunión que hará que su mente divague.
-       ¡No Cierre los ojos, será más fácil que se duerma!
-       ¡Lea los textos citados! Use su Biblia, no el celular. Existe más tentación de distraerse. 

Escuchar Con Fe.
-       Para ser edificado es necesario escuchar con una disposición de aceptar y creer lo que enseña la Palabra de Dios.
-       Recuerde Hebreos 4:1-2: Los que murieron en el desierto “pero no les aprovechó el oír la palabra, por no ir acompañada de fe en los que la oyeron”.

Lo Más Importante: Oír Con La Intención De Practicar La Palabra.
-       Debemos oír con la intención de practicar la palabra de Dios (Stg. 1:22-25).
-       Por tanto, es necesario que con más diligencia atendamos a las cosas que hemos oído, no sea que nos deslicemos” (Heb. 2:2).


CONCLUSIÓN:

Jesús dijo: “Cualquiera, pues, que me oye estas palabras, y las hace, le compararé a un hombre prudente, que edificó su casa sobre la roca. Descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y golpearon contra aquella casa; y no cayó, porque estaba fundada sobre la roca.
Pero cualquiera que me oye estas palabras y no las hace, le compararé a un hombre insensato, que edificó su casa sobre la arena; y descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y dieron con ímpetu contra aquella casa; y cayó, y fue grande su ruina. Y cuando terminó Jesús estas palabras, la gente se admiraba de su doctrina; porque les enseñaba como quien tiene autoridad, y no como los escribas”.

Lucas 7:24-29

1 comentario:

Unknown dijo...

Que bendicion dios te bendiga hermano😇🙏